Norte de la Torre de Marboré, Vía Ravier-Dufourmantelle

Estas últimas semanas, los que me conocéis sabéis que he vivido una situación difícil. Pero tras mantener hace unos días, una conversación telefónica y poder ir a ver a Jorge y ver que es el tío más duro y luchador que te puedes echar a la cara, me han entrado muchas ganas de escribir esta reseña que tenía pendiente.

Para mi Jorge, Paco y Ramón (y Raúl) son mucho más que amigos, grandes compañeros, casi familia. Con ellos he vivido grandes experiencias y aventuras en la montaña, tanto en Alpes, como en Pirineos, Picos de Europa, Gredos…  y con ellos viví una desagradable experiencia, al sufrir un accidente escalando hielo en la cara norte del Curavacas, en el que Ramón y yo salimos ilesos, pero Paco y Jorge sufrieron lesiones de diversa consideración que les mantendrán aparatados de su pasión durante algún tiempo.

Esta entrada va para ellos, en especial para Jorge, ya que esta actividad era un viejo y deseado proyecto que tenía y que tuve la suerte de compartir con él.

Veníamos de viaje de vuelta de escalar en los Ecrins, con intención de escalar otras cuantas vías en los Pirineos, y nuestra primera y más deseada opción era la Norte de la Torre Marboré en el Circo de Gavarnie, así que tras un largo viaje nos plantamos en Gavarnie.

La Ravier-Dufourmantelle en la cara norte de la Torre Marboré es una gran clásica de los Pirineos. Es una vía que es difícil encontrarla en unas condiciones óptimas, como nos las encontramos nosotros. La mejor época para no encontrarte con la vía empapada es en el mes de Septiembre, aunque dependerá de las condiciones meteorológicas de cada año, ya que los neveros en su parte superior la mantienen empapada durante gran parte del año. Nosotros la escalamos el 8 de Agosto, con la pared completamente seca, salvo un largo que creo que es inevitable que este empapado y además te empapes, tú, las cuerdas y el material, ya en la parte final de la vía, escalamos por una cascada de agua sobre una roca sorprendentemente adherente.

Nosotros nos la planteamos como una actividad rápida y ligera, en el día y creo que es una buena opción para no ir con mochilas pesadas, a no ser que te quieras quedar por allí por placer. De hecho, a nosotros la actividad completa nos algo menos de 12 horas, y al acabar, nos dio tiempo a bajar a Gavarnie y dar un paseo por sus calles y disfrutar del circo desde otro punto de vista.

 

COMO LLEGAR

Nos tenemos que dirigir a la localidad francesa de Gavarnie, en la región de Occitania de los Altos Pirineos. Famosa por su circo glaciar y su gran cascada que supera los 400 m. de caída vertical.

Continuaremos hacia la Estación de esquí de Gavarnie-Gèdre y el Col de Tentes.

Si tenéis intención de pernoctar en la zona, el parking del Col de Tentes, está dentro del Parque Nacional, y está prohibida la pernocta, pero poco antes de llegar, junto a un remonte de la Estación de esquí de Gavarnie-Gèdre, estaremos fuera del límite del Parque Nacional de los Pirineos, y ahí sí se puede pernoctar con furgos.

https://goo.gl/maps/qWnWxxVrc9DjA6tV9

 

De madrugada nos acercamos hasta el Aparcamiento de Col de Tentes (2.208 m.) e iniciamos la marcha de noche.

https://goo.gl/maps/TQSzyLqxpmbYraPm9

APROXIMACIÓN

Desde el Col de Tentes los primeros metros son muy cómodos, por un camino asfaltado casi sin desniveles hasta el Puerto de Bujaruelo (2.272 m.), por la otra ladera del valle continuamos por una senda bajo el Pic de Gabietous y el Taillon (3144 m.). La senda asciende sin perdida y progresivamente hacia el Col y el Refugio des Serradets. En el último tramo la pendiente se acentúa y tendremos que cruzar las cascadas que forman el arroyo del Taillón.

En las proximidades del refugio, preparamos el material con el que vamos a escalar y dejamos las mochilas, bastones… etc. que recogeremos a la vuelta.

La aproximación hasta el pie de vía, está entre poco y nada marcada, por viras entre pedreros, evitando los espolones, perdiendo altura que tendremos que volver a recuperar. Buscando el camino más sencillo, con tramos incomodos de pedrero suelto, hasta situarnos bajo la La Torre  de Marboré y un marcado diedro que recorre en parte la vía. Treparemos por terreno fácil y más compacto hasta que la pared se pone vertical, donde montamos la R0, en la base un diedro.

 

NORTE DE LA TORRE DE MARBORÉ, VÍA RAVIER-DUFOURMANTELLE. 450 m. 6b+ (6a oblig)

Abierta en Septiembre de 1956 por Claude Dufourmantelle y Jean Ravier.

Gran clásica de los Pirineos que surca diedros y fisuras en un estilo impecable. Vía protegida con clavos y algún spit/parabolt, y que requiere mucha autoprotección. En las fisuras veremos restos de los tacos de madera utilizados en la apertura. El grado general de los croquis es recio y no conviene confiarse, la roca en general es buena, en los largos más verticales es muy buena y los tramos más sencillos algo más rota, por lo que habrá que prestar atención.

La actividad en si es una aventura, navegando por la pared, con largos compactos y tirones, y largos curiosos que discurren literalmente por dentro de la pared, como si fuera una cueva y otro por una cascada de agua, hasta que salimos a la parte alta del circo de Gavarnie, con un ambiente y paisaje difícil de superar.

 

MATERIAL

Doble cuerda

Juego completo de Friends hasta el #4, repitiendo tallas medias.

Semáforo alliens

Fisureros

 

L1, IV+ - 45m., Largo sobre un diedro chimenea, agradable de escalar, perfecto para desperezar el cuerpo para lo que nos viene. Sobre una roca algo fracturada y que no se deja proteger muy bien. R de clavos.

L2, V - 30m., Comienza por una placa de roca compacta y adherente. Nos incorporamos por un diedro fisurado y tumbado que nos lleva hasta la base del gran diedro amarillento. R de clavos y spit.

L3, 6a+ - 30m., Largo exigente y de grado ajustado. Diedro muy vertical que protegemos con friends grandes, que habrá que saber administrar. En los primeros metros hay algún taco de la apertura con anilla de alambre. El largo es muy mantenido con pasos finos y exigentes. La R sobre clavos.

 

L4, V+ - 30m., Se puede salir directamente a la izquierda sin proteger, después de lo visto decido subir hasta el cuerno de roca con cordinos para proteger los primeros metros de la travesía. Una vez chapado, en travesía descendente, atravesamos la placa con buenas manos y pies en adherencia vertical. Varios clavos protegen la travesía y la fisura más sencilla hasta una repisa. Esta R es de parabolts, porque coincide con la vía Sida Vertical.

L5, 6b+ - 40m., Largo clave de la vía, mantenido y exigente, las mayores dificultades se concentran en los primeros metros, tras una corta travesía descendente, nos incorporamos a una fisura, protegida con un único parabolt alto, en la que se agradecen los guantes de fisura,  empotrando pies y manos y algún movimiento en bavaresa.

La parte superior aunque floja un poco, sigue siendo mantenida, desploma y aunque tienen canto no es para relajarse, eso si protegido con bastantes clavos. Con tendencia a la derecha, en travesía con canto y mucho ambiente llegamos a una reunión de clavos bajo el diedro chimenea.

L6, V+/6a - 20m., Largo de chimenea con clavos y buena roca. Es un largo corto hasta una repisa. Montaremos la R con nuestros mesios, en un gran bloque con 2 buriles muy altos a los que no se llega.

L7, V/V+ - 60m., Largo en diagonal a la derecha, los primeros sobre roca aceptable con pequeños resaltes, la parte final, tras cruzar una canal, fácil pero sobre roca descompuesta, hasta salir a una especie de hombro.

L8, IV+ - 60m., El largo curioso de la vía, lo primeros metros por prado o nieve, para meternos dentro de una grieta. Escalamos por el interior de la grieta, roca sucia, y poco evidente. Escalada en chimenea sencilla pero de difícil protección. Nos incorporamos en el muro de la izquierda y volvemos a girar a nuestra izquierda para salir de la cavidad por terreno sencillo, sucio, húmedo y raro. Justo antes de la cascada hay un par de clavos para la R, reunión no muy cómoda y en función del aire y la cantidad de agua nos empezaremos a mojar.

L9, V - 60m., Otro largo diferente, nunca había escalado un largo sobre agua, pero en este literalmente escalas una cascada. Poneros el impermeable y contar con que vais a salir mojados si o si… Sorprendete adherencia de la roca que es muy rugosa.

Tras el diedro mojado nos salimos por viras por terreno fácil, superamos un gran bloque, fácil pero con ambiente hasta un clavo donde montamos la R.

L10, IV - 30m., Largo fácil, salimos en travesía a la izquierda y superamos un pequeño resalte hasta otra gran vira. Desde esta vira se podría salir andando hacia la izquierda y evitar el último resalte. Nosotros decidimos escalarlo, estaba algo mojado, pero tiene mucho canto.

L11, V+ - 15m., Pequeño resalte para salir a la parte alta de la pared. Tiene un apretonin para incorporarse, que con la roca mojada se hace más psicológico que duro. Salimos a la parte alta con cuidado de no tirar piedras hasta la base del nevero que provoca la humedad de estos últimos largos.

 

Desde el final de la vía saldremos andando hacia la derecha, y ascendemos a la cima de la Torre de Marboré (3.012 m.) por una sencilla trepada, aunque hay otras opciones. Disfrutamos de la cima de las vistas hacia el circo de Gavarnie.

DESCENSO

Volvemos sobre nuestros pasos e iniciamos el descenso, por canales de tierra y piedra suelta, hitadas hacia una collada entre Le Casque y el Pico Anónimo.

Siguiendo hitos enlazamos con la senda que ya sin perdida nos lleva a la Brecha de Rolando (2.805 m.) con un tramo equipado con cable de acero a modo de pasamanos.

Había visto muchas fotos de la Brecha de Rolando, pero nunca había estado allí y fue un lugar que me gustó conocer.

Aquí se nos acabó la soledad en la que habíamos estado durante todo el día, la zona está muy concurrida y vivimos situaciones “extrañas”, teniendo que ayudar a un muchacho francés que se había enriscado por un pedrero de piedra suelta y mucha pendiente, tirando piedras a la senda en la que sus abuelos le esperaban sin poder ayudarlo.

Descendimos rápido hacia el refugio, por la senda que no tiene perdida, recogimos el material y retornamos de nuevo hasta el Col de Tentes.

 

Una aventura muy recomendable, en un entorno excepcional, y que pillamos en muy buenas condiciones, y que disfrutamos como enanos, con buenas sensaciones, muy contentos. Desde aquí cruzamos a España y continuamos por nuestro periplo por los Pirineos, para escalar otra muy buena vía en Congost de Montrebei, en la Pared de Aragón la vía CADE, otra buena aventura.