Caminos Tradicionales de Sanabria (Trefacio)

Otra pequeña ruta que hemos hecho este Otoño de lluvias y convalecencia por la lesión en la pierna ha sido en Sanabria.

Una ruta muy recomendable en la comarca Sanabresa, en la que casi siempre vamos a las rutas más conocidas como las Cascadas de Sotillo o el Cañón del Tera o Cañón de Cardenas. Pero hay caminos tradicionales que unen las poblaciones de la comarca y que te adentran en los bosques de robles y en la arquitectura tradicional, que merecen mucho la pena, y mas aun en Otoño, con los colores típicos de esta estación.

Sanabria para nosotros es siempre una opción, pero en estas fechas nos gusta especialmente, porque no hay las aglomeraciones del verano o ciertos puentes. Y poder estar solos en ciertos sitios que en verano están petados es una auténtica gozada.

En esta ocasión tras pasar la noche en el área de autocaravanas de Trefacio (aunque parezca mentira completamente solos), nos desplazamos hasta Trefacio para iniciar esta pequeña ruta que une las localidades de Trefacio, Galende, Pedrazales y Vigo.

Hay un blog, BIKERSDURI, que ha realizado un gran trabajo de divulgación de estos caminos con diferentes rutas de wikiloc, más pensadas para BTT, pero que se pueden acoplar para rutas de senderismo y que os recomiendo consultar para diseñar vuestra propia ruta, con un plano general de gran parte de los caminos existentes.

COMO LLEGAR

Nos dirigiremos a la localidad de Trefacio, a la entrada de la misma hay un ensanchamiento (en el que se podría estacionar) y un puente sobre el rio Trefacio que nos lleva al frontón de la localidad, en el que no hay mucho sitio, pero esta vez se estacionaba sin problema.

https://maps.app.goo.gl/1VVLUSoPARt5wRE66

 

DATOS TÉCNICOS

DIFICULTAD: FÁCIL

DISTANCIA: 7,5 Km

DESNIVEL

Positivo: 200 m. Negativo: 200 m.

HORARIOS: 2 h

TRACK: Descárgate aquí el TRACK

 

 

LA RUTA

La ruta es una unión de diferentes caminos tradicionales, la intención era hacerla algo mas larga, pero en un cruce nos equivocamos y la recortamos un poco, pero se puede ampliar todo lo que queramos enlazando más caminos tradicionales.

 

Desde el frontón continuamos por la calle que va por detrás del mismo hasta el cruce con otra calle, donde giramos a la izquierda. Esta calle asfaltada nos lleva hasta el cementerio de Trefacio. Nos adentramos ya en el robledal, por un camino tradicional que une las localidades de Trefacio con Galende. Acompañados por el rio Trefacio, en esta ocasión con caudal especialmente alto tras las últimas lluvias.

Tras un giro en una zona abierta a la altura de la confluencia de los ríos Trefacio y Tera, llegamos a un puente sobre el rio Tera, que da acceso a la localidad de  Galende. merece la pena acercarse a observar el Molino y volver sobre nuestros pasos para tomar el camino tradicional que une Galende con Pedrazales. Este tramo es especialmente bonito, por un camino mas estrecho entre grandes ejemplares de robles, siguiendo el GR-84. Llegamos así a Pedrazales, que atravesaremos por sus calles, pendientes del desvío de la ruta a la derecha, señalado por las señales del GR.

Enlazamos aquí con el camino tradicional que nos llevaría hasta Vigo de Sanabria, por un tramo muy bonito también. Castaños, robles y tramos excavados en el terreno, hasta una bifurcación que señala Vigo y Trefacio. Aquí fue donde nosotros nos despistamos. La idea era haber alargado algo mas la ruta llegando a Vigo de Sanabria, pero nos tiramos hacia Trefacio.

Desde Galende hasta este punto es donde se sube el poco desnivel que tiene esta ruta. Lo que nos queda es prácticamente llano y descendente hasta Trefacio, por un camino más ancho y que nos adentra de nuevo en Trefacio pasando por un horno comunal y por las estrechas calles de esta localidad, donde se puede disfrutar tambien de la arquitectura tradicional, que por desgracia tiende a desaparecer, por el mal estado y difícil recuperación de muchas de sus construcciones.

Asi llegamos de nuevo al frontón. Otra pequeña, pero muy bonita ruta de la comarca Sanabresa, que merece mucho la pena hacer en Otoño.

Estoy seguro de que volveremos con las bicis, y con mi pierna recuperada, para seguir conociendo los caminos tradicionales de Sanabria.