Peña Rabanal: Directa Yerai

Hacía tiempo que no escalaba una vía entera de segundo, pero esta ocasión lo merecía. Rubén ha empezado con la escalada clásica y había buscado una vía para irse soltando. Podíamos haber compartido los largos, pero le vi con ganas de hacerla entrera de primero, y yo la disfruté viendo como le ha picado el bicho, y viendo como progresa en la escalada.


La vía yo no la había hecho, y era la que me faltaba por hacer de la Peña Rabanal. La “Directa Yerai”, una vía perfecta para iniciarse en el cacharreo, grado asequible, cómoda y con seguros fijos en los pasos más difíciles, pero que requiere de mucha autoprotección, con largos limpios.

En esta misma pared discurren las vías “Los Cuervos de Odin”, la última equipada en la pared y “Luna de Lobos”, que escalé hace muuuuchos años en mis comienzos en la escalada clásica y que repetiré algún día de estos.

Además la vía tiene una carga sentimental y trágica muy fuerte. Esta dedicada a “Yerai”, un joven montañero fallecido en el año 2006 en la Arista de Lekanda en el Macizo de Gorbea. Yerai era el hijo de otro activo montañero, Juan Jose Blas, el cual falleció trágicamente en otro accidente en el 2014 en la Torre del Pomelo de los Picos de Europa, y al que también dedicaron una vía los compañeros Xiblo y Setmil, en las Gemelas de Robledo “Juan Jose Blas”. Una trágica historia, con 2 vías en la comarca de Luna, en su recuerdo.


La Peña Rabanal se situa en la localidad de Rabanal de Luna, en la comarca de Luna, León. Con vistas del Valle de Luna, y la cola de su embalse, y hacia la comarca de Babia. Con un paisaje exhuberante en primavera.




COMO LLEGAR

Acceso desde la AP-66, en la salida de Caldas de Luna, por la carretera CL-626 dirección Villablino hasta pasar Rabanal de Luna. Poco después de cruzar esta pequeña localidad a la altura del Pk. 44., hay un gran apartadero a la derecha con una explanada junto a la Ermita de la Virgen de Pruneda, donde estacionamos.

https://goo.gl/maps/PwVLXoZDH9Kbd4G9A


APROXIMACIÓN

Desde la ermita tendremos que ir andando por la carretera en dirección a Rabanal de Luna hasta poco después de la Fuente de la Fuente Pruneda un manantial que surge de la roca. Poco después nos subimos sin un camino definido hacia la canal que tenemos a nuestra izquierda.



Una trepada sencilla para salir de la carretera, y entre el pedrero y las sendas que hay por el lateral izquierdo de este, vamos ganando altura. Llegamos a un hombro desde donde podemos ya observar la pared y orientarnos para llegar el pie de vía. Seguimos ascendiendo por el pedrero o trepando fácil por roca tumbada compacta, hasta llegar a la pared. Veremos de frente el pie de vía de la Directa Yeray, con un parabolt a pocos metros del suelo.

 

PEÑA RABANAL- DIRECTA YERAI 225 m.  V+  

Abierta por Ramón Canales en solitario en el año 2012.

Unos 225 metros repartidos en 5 largos, con un grado máximo de V+, en 2 pasos concretos, desde mi punto de vista, fáciles. Reuniones fáciles de identificar, ya que todas tienen al menos un parabolt. Algún parabolt en el recorrido cubre los pasos más difíciles y complementaremos la protección con nuestros medios, con 2 largos completamente limpios. La vía no es rapelable, por lo que habrá que subir zapatillas para el descenso.

 

MATERIAL

Doble cuerda de 60 m.

12 cintas (varias largas)

Juego de Friends hasta el 3#

Semáforo de alliens

Juego de fisureros


El croquis es otra de las obras de arte de Ramón Canales, en la que con su permiso, he añadido los seguros fijos que hay en la vía.

 

L1, 45m. V/V+ Bautizado por el aperturista como “sarcófago”, por la forma de la placa por la que discurre. Comienza por un murito con buen canto protegido con un parabolt, a mi no me pareció V+. Continuamos por una zona de placas fisuradas más tumbadas, con otro par de parabolts. Y llegamos al que para mi es el paso más difícil que tiene el largo,  a la altura del ultimo parabolt, con un arreón más largo sobre buen canto y pies en adherencia. En una buena repisa nos encontraremos con la R de dos parabolts.



L2, 40m. V/V+ Comienza por una placa tumbada, hasta unas anchas fisuras, en la parte alta de estas hay un parabolt. Nos incorporamos por encima de el en una placa y por una vira hacemos una travesía a la izquierda hasta una repisa.

 


Nos quedan unos pasos de placa muy buenos, con 2 parabolts. El primero queda un poco alto y hay que meterse en la placa, pero tiene pequeñas regletas y repisillas que te dejan mover bien por ella. Con tendencia la derecha, para superar un techito antes de llegar a otra buena repisa donde está la R, con un parabolt y un árbolito que lazaremos.

L3, 50m. IV Por la derecha del arbolito nos incorporamos a una placas tumbadas y fisuradas, con muchas posibilidades de protección y fáciles de escalar. Llegamos hasta otra zona repisada, pendientes de encontrar un parabolt pintado de rojo, que reforzaremos para montar la R.


L4, 50m. V Al principio en la tónica del largo anterior, placa tumbada y fisuras, con varias opciones de por donde ir, de dificultad similar. Nos acercaremos hacia un diedro con vegetación y sin meternos, por la derecha de él, nos incorporamos en una placa algo más vertical con cantillo, para poco después superar un techito.


Superado el techito nos encontramos con un parabolt que reforzamos para montar la R.

L5, 40m. IV+ Probablemente el mejor largo de la vía. Discurre por el filo de un pequeño espolón, al principio tumbado y que va cogiendo verticalidad progresivamente.

La segunda parte es más aérea y sobre roca compacta, exceptuando algún bloque con el que tendremos cuidado. 2 parabolts cubren este tramo.


En la parte alta de la pared, fuera de la vertical, montaremos la R sobre 2 puentes de roca. Aqui se nos abren las vistas hacia la comarca de Babia y la imponente Peña Ubiña.

 



DESCENSO

Hacia la derecha por un corto tramo de arista con un fácil destrepe para llegar a la canal. Descendemos la canal andando, por una senda no muy marcada.




Antes de llegar al final de la canal hay que salirse a la derecha, destrepando fácil por una zona kárstica, por donde podamos…al menos nosotros no vimos ningún camino más evidente, hasta salir ya casi abajo a un terreno más cómodo de prado y tras pasar por un pequeño sector de escalada deportiva llegar a la Ermita de la Virgen de Pruneda, donde tenemos el coche.


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