Ya había probado a foquear y
descender con bota dura, y las sensaciones fueron buenas. En esta ocasión puse
a prueba lo que yo buscaba, una actividad de alpinismo con aproximación y
descenso en Split, y las sensaciones han sido inmejorables, comodidad, ligereza
y seguridad. Esto me abre mucho el abanico de posibilidades, lo único que me
falta es tiempo... jajaja!!
Voy a empezar por el proceso
de transformación del Splitboard, para poder utilizarlo con bota rigida. El
sistema es sencillo:
Primero montar una fijación
de esquí de montaña, Dynafit Speed turn 2.0 en mi caso, de las que de momento
solo he montado la puntera, respetando las alzas de Voile. Aunque me estoy
planteando, ya visto el resultado, el montar la fijación completa para poder
hacer algún descenso en modo esquí, si fuera necesario (aunque primero tendría
que aprender a esquiar). Y comprar unas fijaciones específicas para Split y
bota dura para el descenso, en mi caso opte por las DYNO DH. Otro complemento importante son las cuchillas, para estas nuevas fijaciones, las D REX CRAMPON.
Y segundo, comprar unas botas d esquí de travesía. En este caso tuve mucha suerte, ya que las compre de segunda mano por Wallapop a muy buen precio, sin haber probado una bota similar, y acerté de pleno. Son las Dynafit TLT 5 una bota ligera y comodísima, caliente y con una movilidad similar a las botas de alpinismo, muy muy contento.
Con este sistema, lo que más
se nota es la ligereza y la seguridad (con más rigidez a la hora de cantear y la
posibilidad de uso de crampones automáticos).
Y como estreno de una
actividad de alpinismo combinado con el Splitboard, fue una actividad que hice
con Ramón Cifuentes a Peña Ubiña, en el que escalamos una combinación del
primer tramo de Corredor Mari Paz, y el segundo tramo del Gli Gli, con unas
condiciones de nieve bastante buenas, haciéndolo desencordados, superando algún
resalte bastante pindio con algo de hielo, y descendiendo por el Canalón
Suroeste Leones.
La pena fue que el día se estropeo a media mañana teniendo muy
poca visibilidad, motivo por el que salimos por el corredor GliGli, más que
nada porque no teníamos muy claro ni donde estábamos… y el descenso, con un
fuerte viento en la arista y la nula visibilidad nos obligó a descender unos
metros andando hasta que las condiciones de visibilidad, pese a que seguían siendo malas, no entrañaban
peligro. Aun así disfrutando mucho mucho, tanto en el ascenso como en el
descenso.
Ya hay varias entradas en el
blog, sobre Peña Ubiña, en ellas podéis ver el COMO LLEGAR y la APROXIMACIÓN:
Juego de
Lagrimas, Gli Gli-Maripaz, y la Integral de Ubiña.
En la aproximación la nieve
continua la pillamos en la curva que hace la pista a una altura de 1.550 m.,
donde pudimos calzarnos las tablas y llegar foquenado hasta escasos metros de
la Aguja de la vertiente Noroeste de Peña Ubiña, unos 400 metros de desnivel.
En la base de la aguja,
preparamos el material, nos pusimos el arnés y sacamos lo piolets y crampones,
dejando la cuerda de momento en la mochila.
MARI
PAZ – GLI GLI (450 m. III/3-)
El corredor lo abrió en solitario en Diciembre de 1988, Ambrosio Izquierdo “Tito”, dedicándoselo a su mujer Mari Paz. Ambos buenos amigos de mis padres en mi infancia, con los que compartían algo de monte y carreras, y del que se me quedo una imagen grabada en la memoria, cuando vi a Tito escalar en aquellos entonces, en Recuevas y las Tuerces siendo la primera vez que veía escalar, no teniendo muy claro entonces ni lo que era.
El corredor lo abrió en solitario en Diciembre de 1988, Ambrosio Izquierdo “Tito”, dedicándoselo a su mujer Mari Paz. Ambos buenos amigos de mis padres en mi infancia, con los que compartían algo de monte y carreras, y del que se me quedo una imagen grabada en la memoria, cuando vi a Tito escalar en aquellos entonces, en Recuevas y las Tuerces siendo la primera vez que veía escalar, no teniendo muy claro entonces ni lo que era.
El acceso al corredor
Maripaz se hace en travesía hacia la izquierda, hasta el tercer embudo, el
primero sería el que da acceso al Corredor de la Aguja y Juego de Lágrimas, el
segundo seria la entrada a Elixir de la
Suerte y Gligli, y en el tercero tenemos el acceso a Maripaz y Brojos Sio.
El primer tramo es una canal
de nieve a unos 45º, ascendemos esta pala hasta casi el final donde, a nuestra
derecha, se abre una canal oculta y encajada, por la que ascendemos, cruzando
por un arco de roca, a unos 70/75º, la parte mas pindia estaba a la salida del
agujero, donde tras unos metros la canal gira ligeramente a la izquierda, por
un tramo que habitualmente puede estar en mixto (III), pero que en esta ocasión
estaba totalmente tapado y fácil de progresar 50º.
Decidimos seguir sin
encordar, porque las condiciones eran muy buenas y los sitios donde asegurar
eran escasos por la cantidad de nieve que tapaba casi todo.
Continuamos ascendiendo por
la izquierda de un gran bloque, aquí la visibilidad ya era muy baja, y nos
costaba bastante orientarnos. El corredor Maripaz continua de frente, pero
nosotros nos despistamos y ascendimos con tendencia a la derecha por encima del
gran Bloque, escalando un pequeño resalte de 70/75º con hielo, un paso fino que
gracias al hielo se fraccionaba con seguridad, y saliendo en travesía hacia la
derecha hacia una canal mucho más amplia por lo que ya debía de ser la parte
alta del corredor Gli Gli 50 / 40º, hasta la arista, donde el viento soplaba
con fuerza.
La profesión por la arista fue dura, por el frio, el viento que golpeaba en la cara, y la nula visibilidad. Aun así hicimos cima y rápidamente por la misma arista hasta llegar al acceso al canalón Suroeteste Leones.
La profesión por la arista fue dura, por el frio, el viento que golpeaba en la cara, y la nula visibilidad. Aun así hicimos cima y rápidamente por la misma arista hasta llegar al acceso al canalón Suroeteste Leones.
La visibilidad seguía siendo
nula y el viento nos impedía pararnos para calzarnos las tablas, por lo que
tuvimos que bajar unos metros para poder calzarnos los esquís y tabla con algo
de seguridad. Y a disfrutar… buena nieve con una capa reciente de la noche
anterior, no mucha visibilidad, que aumentó a medida que descendíamos. Los
primeros metros con bastante pendiente, costaba girar, pero poco apoco, las
piernas se entonaron y disfrutamos de un guapo descenso de esta vertiente de
Ubiña. Apurando los neveros, llegaríamos hasta los 1.450m., por lo que hicimos
un descenso de unos 800 metros de desnivel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu comentario va a ser revisado con el fin de evitar SPAM y comentarios ofensivos