Y aunque la previsión era buena, esta vez Maldonado no acertó. Escalamos y disfrutamos, pero fue un día duro, con mucho mucho frío. La nube impedía que nos diera el sol y el viento acentuaba la sensación de frío, escalando con todo puesto y con las manos y pies congelados gran parte del día.
Era la tercera vez que
escalaba en el Torozo. Esta vez no juntamos un buen grupo de escaladores de
Zamora y Benavente, Jorge y Ramón hicieron “Estación Calfornia”, Raúl, Paco y Jose
hicieron “Pólvora Mojada” y Kike y yo
optamos por Guirles-Campos, nuestra vía, buenísima y exigente.
Podéis ver en la entrada del
blog de “El Torozo: El niño y Cada vez que ladras cobras”, algo de información
de la zona, COMO LLEGAR Y APROXIMACIÓN.
Si queréis conocer a fondo
la zona, os recomiendo que compréis la guía: Vías de escalada en Roca en la Sierra de Gredos: ALBUJEA Y EL TOROZO de
Gabriel Martín y Chema Mancebo, en ella vienen los croquis de esta y otras
muchas vías.
GUIRLES-CAMPOS,
6b 250 m.
La abrieron en el año 1977 la
mítica cordada Daniel Guirles y Luis Campos.
Nosotros, a parte de la guía, seguimos este croquis que vi en el blog “El campo 4…”, entrando por la variante de entrada de la “Gabino pan y vino”. De esta manera queda una entrada directa a los largos superiores, con un buen primer largo de placa.
La entrada original a la vía
discurre unos metros a la izquierda, teniendo como referencia un pequeño árbol.
Nuestro pie de vía lo situamos bajo la línea de parabolts de la placa del
primer largo de Gabino pan y vino.
En general es una vía de
autoprotección, con muy pocos seguros, algún clavo y los parabolts de la placa del
primer largo si la hacéis por la Gabino. Las reuniones están todas montadas con
2 o 3 parabolts con cancamos.
Es necesario un juego completo de fisureros y Friends, repitiendo
las tallas medias de Friends (0,5 a 2), y según lo sueltos que vayamos de 14 a
16 express.
Se reparte en 7 largos más
la trepada final, aunque nosotros la hicimos en 6, empalmando el L3 y L4.
L1
V+, 45 m. Comenzamos por una trepada fácil entre repisas y una fisura en
dirección a los primeros parabolts de la placa. Estos primeros pasos de placa están
protegidos por 2 parabolts, con un primer paso fino de adherencia. Tras unos
pasos más relajados en travesía a la derecha afrontamos una segunda placa de adherencia
con 3 parabolts, pasos obligados, muy de pies, de nuevo finos y que obligan a
trabajar la cabeza y la confianza en la adherencia.
L2
V, 25 m. Largo poco atractivo, que nos une con la vía
original. Salimos en travesía horizontal a la izquierda, para afrontar una zona
sucia de musgo, aunque las presas claves si están limpias. Un murito fisurado
sencillo y llegamos a un diedro/canal muy fácil que en pocos metros de trepada
nos lleva a la R2.
L3+L4
6a, 55 m. Muy buen largo, sobre todo si empalmamos el L3 y
L4. Y en el que utilizaremos todo el material.
Comenzamos por una fisura
fina en búsqueda de un primer clavo, abandonamos la fisura hacia la izquierda y
llegamos a otro clavo (raro) con anilla. Aquí se puede hacer un péndulo, pero
el paso sale en libre por la placa sin mucha complicación. Una travesía
descendente para llegar a la fisura de la izquierda.
Continuamos por la fisura en
bavaresa con algún pasete y llegamos a la R3, opcional. Continuamos con
tendencia a la derecha, parece que está sucio, pero se progresa sin problema,
fisura en bavaresa, algo más fácil. Al final son 40 metros de fisuras en
autoprotección que entre lo que tiran y la cabeza, hacen que saques lo mejor.
L5
6b, 50 m. Largo espectacular y exigente. En algún croquis he leído
6b/Ao, para mi Ao es tirar de seguros fijos, este largo está limpio y aunque se
protege bien, o escalas o no sales de ahí, al menos en Ao. Aquí también utilizaremos
casi todo el material.
El largo empieza con
tendencia a la derecha por un diedro tumbado, hasta que llegamos al diedro
vertical. Para mí los pasos más duros estaban en el comienzo de este diedro,
muy vertical y con pies de fiarse y manos agarrando la fisura con presa no muy
neta.
En la parte media del diedro
relejamos un poco y afrontamos los últimos pasos que se ponen de nuevo muy
verticales y con mucho ambiente. Un paso mas tirón con presas pequeñas pero
netas en la parte izquierda del diedro, un buen apretón hasta que agarramos un
buen cazo y relajamos. Aunque todavía queda un paso tonto para llegar a la
reunión, hay presa grande pero no te puedes relajar. Reunión colgada con 3
parabolts con cáncamo.
La satisfacción al encadenar este largo es muy alta y la adrenalina corre.
La satisfacción al encadenar este largo es muy alta y la adrenalina corre.
L6
V, 20 m. Largo corto y sencillo, con un paso tonto para
superar un pequeño resalte sobre una fisura roma.
L7
6a, 40 m. Otro buen largo diferente a los demás, un muro
fisurado que desde abajo se ve sencillo, pero luego hay que apretarlo. Buena
presa en las fisuras, pero te va poniendo. Al acabar el muro salimos a unas
repisas, ya por terreno sencillo. Yo monté reunión con Friends en una buena
repisa, para que no hubiera muchos roces, se supone que unos metros por encima
hay otra reunión de cáncamos, pero no la llegamos a ver.
L8
III+, +100 m. No es un largo como tal, escalada fácil
en ensamble. Sobretodo los primeros metros recomendable seguir encordado, una
vez que lo conoces, la parte de arriba se podría hacer sin encordar, ya que no
tiene dificultades, pero sin conocerlo da cosa, y no hay fallo. Seguir el
terreno más evidente por repisas y placas fáciles hasta salir a la cima.
DESCENSO
Recogemos las cuerdas y
salimos hacia la cima del Torozo (El Risco), por un caos de grandes bloques y
repisas hacia la izquierda. Nos asomamos hacia la canal que nos separa
del Alto de los Monteses o Torozo Norte, allí veremos una instalación de rápel.
Hacemos un rápel de unos 25 m. He leído que se puede destrepar, pero es
bastante aéreo.
Desde aquí hay sendas y jitos que nos llevan hacia la canal entre el Torozo y la Albujea. Descendemos toda esta canal, pegándonos hacia nuestra derecha y viendo las impresionantes vías de la Albujea, con espectaculares techos de artificial o 8a+. Una vez en la parte baja de la canal, la senda discurre pegada a la base de pared de la Albujea y nos lleva sin perdida al camino de la aproximación.
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